Autora: Imma Juan
Twitter: @intimind
Por otra parte, enfocarse en los sentimientos más íntimos da cierto yuyu. Un reciente estudio mostró que la mayoría de las personas, si podemos elegir, preferimos que nos sometan a pequeñas descargas eléctricas a estar a solas con nuestros pensamientos.
¡Descargas eléctricas! ¿Te parece fuerte? Pues recuerda lo que pensaste cuando te dijeron: siéntate ahí, en silencio, contigo mismo…
Hablemos claro: La meditación y la contemplación en quietud cuestan al comienzo, pero lo mejor es adquirir el hábito y más aún si se tiene una agenda apretada y paciencia cero. Hemos consultado al respecto a nuestros psicólogos de Elephantplena, Rosa y Jorge.
Lo cierto es que, “con el estilo de vida actual, la mayor parte de la gente asume que el estrés forma parte de su vida, que no hay escapatoria a las presiones que atenazan nuestra mente. Pero esto no tiene por qué ser así.” Nos dice Rosa.
En los últimos años se ha popularizado notablemente la meditación mindfulness, derivada en parte de las técnicas de la meditación budista Vipassana Esta práctica se centra en enfocarse en el momento presente, las emociones, los pensamientos y las sensaciones. ¿El objetivo? Ser capaz de observar todo lo que sientes sin juzgar, y prestar atención y aceptar realmente el aquí y el ahora.
Mucha gente ocupada empieza a reservar un tiempo para meditar: deportistas como Pau Gasol, Kobe Bryant y Lebron James; empresarios de éxito como Arianna Huffington; modelos como Verónica Blume; e incluso la Armada Americana espera que los veteranos puedan experimentar los beneficios del entrenamiento basado en mindfulness.
Entonces: ¿por qué deberías unirte a todos ellos? “La meditación impacta en todas las áreas de nuestra vida, desde la mental al bienestar físico y cada vez hay más evidencias científicas que lo demuestran,” afirma Jorge.
Hay ya unos 3000 estudios sobre mindfulness que demuestran que reduce la ansiedad, incrementa la productividad, mejora el sueño y la memoria y reduce el riesgo de padecer un infarto además de otros beneficios. Pero ¿qué es lo más importante para las personas impacientes? Pues que si estás sumido en la indecisión o predispuesto a hacer una mala elección, la meditación puede ayudarte a decidir de forma más rápida e inteligente.
Un estudio dirigido por The Wharton School and INSEAD mostró que solo 15 minutos de meditación ayudaban a los empresarios a tomar una decisión en lugar de distraerse con factores irrelevantes como el hundimiento de los costes. Meditar ayuda a hacer una pausa y a pensar con lógica antes de una próxima compra o inversión.
Otro estudio sugiere que la meditación ayuda a mejorar el rendimiento académico. Un grupo de estudiantes de la Universidad de California practicó unos minutos de meditación antes de entrar en clase y leer unos apuntes. En comparación con los compañeros de clase que no lo hacían, se vio que este grupo retenía más información de sus lecturas y conseguía mejor puntuación en las pruebas que les hicieron luego.
Además de todo esto ¿sabías que la meditación puede cambiar la composición de tu cerebro tanto como el ejercicio puede cambiar tu cuerpo? Las imágenes MRI recogidas en un estudio del Massachusetts General Hospital mostraron que 8 semanas de meditación pueden incrementar la densidad de la materia gris en el hipocampo (un área crucial para el aprendizaje y la memoria). Las imágenes también revelaron que la densidad de la materia gris disminuye en la amígdala, el área que regula el estrés y la ansiedad.
¿Preparado para cosechar estos beneficios? En honor a los escépticos, los inquietos, ocupados, sobrecargados y todos los impacientes del mundo, presentamos esta guía que recoge lo mejor de la meditación.
1.- Encuentra 10 minutos
“Existe la errónea creencia de que hay que sentarse durante horas y a menudo, pero esto, con nuestras ocupadas vidas, es literalmente imposible,” dice Jorge. Él recomienda a los principiantes empezar con 5-10 minutos al día. “Ante comentarios como “yo no serviría, soy muy nerviosa.” les decimos que todo el mundo puede practicar y no hay forma de hacerlo mal.” Comenta Rosa. ¿Ni idea de cómo empezar? Prueba con intimind. Te servirá de guia en tu práctica. Si no, simplemente utiliza un temporizador que te avise en cuanto pasen los 10 minutos.
2.Limita las distracciones.
Busca un lugar tranquilo donde no te puedan molestar. Deja tu teléfono en otra habitación (o siléncialo si lo vas a utilizar como temporizador)
3. Ponte cómodo/a.
Adopta una postura relajada pero mejor no te tumbes porque no se trata de dormirse. En las sesiones presenciales de Elephantplena, Jorge y Rosa recomiendan sentarse en un cojín o con la espalda erguida en una silla, con las plantas de los pies en el suelo y con los brazos a los lados o sobre las rodillas. Los ojos puedes cerrarlos o dejarlos levemente abiertos.
4. Elige un punto sobre el que enfocar la atención.
El dr. Michael Gervais, psicólogo deportivo que trabaja con atletas de alto rendimiento, recomienda enfocar la mente en una sola cosa para facilitar la práctica. Pon atención en tu respiración, un punto en la pared, una palabra o incluso un sonido particular. Según Gervais, contar las respiraciones puede ser especialmente efectivo cuando estar presente te supone una lucha.
5. Reconoce cuando tu mente divaga.
¿No puedes evitar que los pensamientos viajen hacia la reunión que tuviste ayer o hacia esa fiesta del próximo fin de semana? La meditación es un entrenamiento de uno mismo para “corregir el rumbo del pensamiento y el movimiento” dice Gervais. Según él, cuando tu mente empieza a alejarse, puedes decirle amablemente al pensamiento que viene “hola y adiós” para traerla al momento presente. Reconoce que te has distraído. Luego, sin reprenderte ni enfadarte, redirige de nuevo tu atención hacia la práctica.
6. Acepta que la frustración es normal.
“Es muy normal sentir inquietud, incomodidad, y otras sensaciones desagradables cuando empiezas a practicar, de hecho, es muy natural” asegura Jorge. Los pensamientos que invadirán tu consciencia y tu mente en las primeras sesiones pueden ser de todo menos calma y foco. Puedes aburrirte, desanimarte o incluso enfadarte. La clave está en abrazar estas emociones. “Simplemente toma conciencia del sentimiento, reconoce que forma parte del hecho de ser humano y comprende que todas las personas experimentan algo parecido aunque a veces nos sintamos como si fuéramos los únicos” afirma Rosa.
7. Haz que la meditación forme parte de tu rutina.
No sentirás los beneficios de la meditación hasta que te comprometas a practicar con regularidad. Aunque establecer un nuevo hábito puede ser complicado, una buena opción es añadirla a uno que ya tengas según el dr. Gervais. Por ejemplo, si habitualmente corres o haces yoga cuando te levantas, intenta finalizar tu ejercicio sentándote a meditar por unos minutos.
Sin darte cuenta estarás preparado/a para utilizar con maestría técnicas de relajación y de mindfulness que te ayudarán a mejorar otras áreas de tu vida. Si eres atleta, tu habilidad para rechazar distracciones te ayudará a conseguir estar “en la zona” y permanecer ahí. ¿Propensión a comer caprichosamente? La comida consciente te ayudará a saborear cada plato y a comer de forma más intuitiva que emocional. Hay prácticas de este tipo en el programa “Salud y Estrés” de intimind. Y lo mejor de todo: cuanto más rebajes tu estrés, más concentración pondrás en todo lo que haces y mejorarás tu productividad.
Con información de Life by DailyBurn
Autora: Imma Juan
Twitter: @intimind
Me parece necesario pero no se x donde empezar osea q pienso en ese momento